Heme aquí tratando de asimilar las últimas horas, pensando en que lo único que quiero ahora es dormir y dejar de sentir...
Mis manos están heladas, y tiemblo con cada espasmo nacido de la tormenta en mi interior, y me abrazo por que necesito desesperadamente sentir un poco de calor en medio de esta oscuridad... y me estremezco, pero sé muy bien que no se trata del frío que entra por mi ventana...
Tiemblo por que me da pavor el vacío que se siente en el ambiente, por que sé perfectamente que tengo que aprender a extrañarte sin dejar que esa ausencia duela tanto como tu silencio...
3 comentarios:
hola, no nos conocemos. pero me gusta mucho leerte. llevo un rato checando tu blog, di con el por casualidad y desde entonces no he dejado de leer ni una sola nota.
sabes, creo que existe una gran belleza en tu persona. y aunque en estos momentos la vida parezca mas gris de lo normal, siempre hay una lucecita por ahi que no te deja caer por completo.
la verdad no se ni que escribir. se que no es tan bueno como lo que tu haces, y bueno... solo queria que supieras que tienes un admirador aqui en el df.
cuidate
Fernando:
Pues mil gracias, es un honor para mi lo que me dices... sábete bienvenido a la ventana cada vez que lo desees...
Gracias por el tiempo y por estar aún de lejos...
Un beso...
Doditto:
Creo que mas que astringente, el paso de las horas me ayuda a ir asimilando el vacío y la ausencia... creo que mientras mas tiempo pasa, las lágrimas van perdiendo sentido cuando lo buscan y saben que no regresará... solo es cuestión de dejarlo partir... solo es cuestión de aceptar y dejar que la herida poco a poco cicatrize y deje de doler tanto...
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